domingo, 28 de enero de 2007

Náufrago

Arena, agua y espuma es todo lo que ves, todo lo que ves
piensas en ella y juras que la puedes oler...

y están mirando al sol sin respirar
ambos mirando al sol siempre sin esperar....
te veo desde los pies
te veo del Este al mar.

Selene y mil estrellas más
tratan de formar un espejo en el mar
y ella siempre viene y va,
pero tu nunca la puedes tocar
solo vives tras tu soledad
sigues de pie en las olas de sal
dices que puedes nadar
sobre el tifón quieres volver
volver a nacer.

13/01/2003 1:21 am

Selene = Luna

lunes, 22 de enero de 2007

¿Te animarías a soñar?

Desde hace algunos días estuve pensando qué tan reales son los sueños para una persona, en su momento pueden lograr envolver a los soñadores en un mar de situaciones, conversaciones y sensaciones.
Este pensamiento no es nada nuevo (sino pregúntenle a Descartes), pero lo que sí me llamó la atención después de algunas noches oníricas (las cuales las recuerdo perfectamente) fue el hecho de conversar con múltiples personas que sí conosco (aunque en algunos casos extraños no), pero evidentemente no son ellas mismas, entonces de ¿dónde provienen todos esos diálogos? Es posible que simplemente sea yo mismo creando una conversación monótoma bajo los rostros y a las personalidades de otras personas, basándome en recuerdos y vivencias.
No siempre estas conversaciones son totalmente confortantes, por lo tanto, no necesariamente son emulaciones de lo que me gusataría escuchar de tal o cual persona, entonces ¿qué mensaje me trato de dar a si mismo? probablemente es una manera de llenar el vación del arrepentiemiento o, de crear una realidad paralela, en la cual aún estás a tiempo de hacer o decir algunas cosas.
Pienso que debería llegar a la siguiente conclusíon: algunos sueños pueden ser una señal que nos trata de decir que debemos vivir el presente al máximo y no pensar en el pasado ni en el futuro, sino en este preciso instante, puesto que la única manera de volver al pasado es a través de los sueños.
Por lo tanto, es realmente complicado comprender si nosotros mismo controlamos nuestros sueños. ¿o no?

domingo, 7 de enero de 2007

A pocos minutos de Pucacaca (Tarapoto) ...


Lo que hizo el frío...

El cielo se dibuja en tu sonrisa
tan azul y apacible como las hojas verdes en plena brisa...

Tus ojos se reflejan en la nieve
tu pensamiento se pierde en mi mirada
y ahora que no puedo pensar ni en mi suerte
sólo deseo verte en la alborada

Nunca pensé en que nos dejarías
nunca me imaginé lo frágil que es la vida
sólo pensaba que estarías aquí para siempre
y ahora sólo quiero soñar contigo cada día

Dicen que el tiempo cura las heridas
dicen que las piedras no recuerdan, ni tienen vida
pero los nobles actos que hiciste en tu vida
serán recordados por más de 100 mil días.

Vermont, 20/2/2006

La Seis.

Empezó la noche, veo vacío el divan...
me confundo y sueño que estás aún aquí...
las miradas dulces se disuelven en el ayer
y sólo espero el atardecer...
¿Cuátos atardeceres veré?... sin pensar en tí.

Pasadisos sin sonidos... huellas que no pueden hablar
ventanales sin cerrar... creo que te escucho respirar
son tristes visiones que se van...

... y siento el sol quemando hasta la sombra del mar
... y trato de expandirme para tratar de olvidar
... y veo tu amor junto a una estrella fugaz
... y quiero escapar donde pueda verte caminar

Día día pienso, bajo los cielos de cristal
en recuerdos lentos que no pueden ni caminar
trato de escuchar tu voz, pero tus cartas no pueden hablar
Siento que estás lejos... pero estás ahí.

Rutas de viaje (En la Jungla)

El jueves terminó el viaje más largo que he tenido con mi familia, casi dos semanas en las montañas verdes de la selva de San Martín.

Todo finalizó muy bien, a pesar de algunos incidentes, (mi prima Lucrecia se enfermón de salmonela, y mi primo Alex se dislocó el hombro) todos regresamos con algunos kilos de más. jejeje (La culpa la tiene el Tacacho con Cecina).

Los paisajes son super bonitos, la comida super rica, y el cielo es de color azul profundo y está adornado con un centenar de bellas nubes.

Navidad la pasé bien, estuvimos en un pueblo muy pequeño llamado Pucacaca (a casi dos horas al sur de Tarapoto), puesto que ahí nació mi tío y ahí aún vive su mamá.
Esta vez no comí mucho como otros años, ya que no había mucha variedad de platos, pero igual la comida estaba deliciosa y desde luego hubo panetón! jejeje
Sin embargo, (auque suene contradictorio) sin bien en esta fecha todo el mundo está muy feliz, yo no me siento un poco triste porque me trae recuerdos de una persona que era la primera en abrazarme y decirme Feliz Navidad, y la verdad no es y nunca será lo mismo, dicen que el tiempo cura las heridas (sólo el tiempo lo sabe).
Pero, sé que esto no va a ser para siempre, algún día la alegría volverá en la Navidad, y la seguiré esperando tranquilo y sereno.

Año nuevo fue muy distinto, dejamos los millones de mosquitos (que me molieron las piernas a picaduras) y la vida de pueblo pequeño (que la verdad me gustó mucho porque se vive tranquilo, sin bulla, sin combis, sin grandes preocupaciones, ves pasar al tiempo lentamente pero siempre con una sonrisa) y nos internamos en Tarapoto para ir a la gran fiesta de la ciudad (supuestamente), el calor seguía siendo agobiante, y sumado al baile, hacían del lugar un volcán.
Al final de cuentas fue como una fiesta de año nuevo más con la difenrecia que recibí el nuevo año junto a mi familia después de 7 años aproximadamente, eso me gustó.

Así fueron más o menos mis dos semanas en la selva, espero que se vuelva a repetir algún día....